Muchos casos de tríos amorosos de la vida real serían dignos de una historia de telenovela, pero como bien es sabido, la realidad siempre supera la ficción y hay algunos que dejan huella de manera imborrable. Hay historias que destacan por lo increíble de sus detalles, por lo improbable que tal vez sucedieran tal como lo hicieron, pero que aun así, siguen siendo tan reales como extraordinarias.
Dos hijos, uno en una chica de 17 años y otro en la madre de ella y quien fuera su suegra, son hoy día las mayores responsabilidades de Daniel, un joven paisa de 18 años a quien el destino, las hormonas y la falta de experiencia le prepararon un coctel muy difícil de digerir.
Este joven al parecer era el compañero sentimental de Camila, una chica de 17 años, quien tras unos meses de relación, quedó embarazada. Hasta aquí las cosas, aunque precoces, no eran nada fuera de lo normal, la sorpresa vino cuando días después de nacer el infante, la joven se enteró de que era su madre quien ahora se encontraba en estado de embarazo, su sorpresa fue aún mayor cuando supo que el padre de su hijo, también era el padre de su ahora hermano y a su vez, padrastro, ya que su padre biológico había fallecido años atrás y desde entonces su madre no había organizado vida sentimental con nadie más.
Según lo relatado por el joven ante la comisaría de familia de Apartadó, durante el tiempo que la joven estuvo embarazada, nació un gusto sexual hacia su suegra, gusto que fue correspondido por ella, dando lugar a que se satisficieran esos deseos pero de manera inexplicable según él ya que se habían protegido, se dio también un nuevo embarazo, creando este triángulo familiar donde juega el papel de padre, padrastro y abuelo.
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